#BajoelManzanillo describía en 1952 «el nerviosismo tradicional que proporcionan los niños del Colegio de San Ildefonso, de Madrid, al cantar los números que van saliendo del ‘bombo'». La «enorme ilusión» que despertaba la Lotería de Navidad, en torno a la radio: «¿Quién será el mortal que no lleve aunque sea una participación de peseta? Y, todos, con la ilusión de ser ricos, de tapar «huecos», de respirar libre y económicamente…»
