#BajoelManzanillo de febrero de 1952 glosa los detalles que hacen ciudad -«aquello que no tiene un fin práctico debe ser demolido»-, a raíz de la eliminación de un quiosco «inservible» en el Paseo; o las labores de mantenimiento -«constituyen una serie de pequeños defectos que sumados indican lo suyo y que restados darían aun más prestancia y decoro urbanístico a la ciudad»-. En otra de las columnas refiere la importancia de la educación ciudadana, a raíz de un caso «cómico e irrespetuoso» que relata.
