#BajoelManzanillo, en plena campaña estival de 1952, con multitudinarios desplazamientos de los almerienses a los balnearios, reivindicaba un servicio de autobuses para «viajar a todo placer». Se pedía prevenir las posibles «averías», que las había, evitar las «colas», no romper «el precepto de no fumar», acabar con el «peligro de quemaduras» y eliminar los abarrotamientos.
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La transformación de la Rambla de Belén en 1952
#BajoelManzanillo relata la importante transformación de la Rambla de Belén que cambiaba la Almería de la época. Los malecones van ampliándose y urbanizándose. En 1952 ya estaba conectado desde el badén final de la calle Granada hasta la misma playa, por los malecones de los Jardincillos y Carlos López Redondo (tras el Instituto Celia Viñas) y la avenida Reina Regente; y, en obras avanzadas, los tramos de la calle Real del Barrio Alto hasta La Salle. Anuncia que continuará el proyecto hasta las Jesuitinas y Oliveros.
La circulación y sus problemas en la Almería de 1952
#BajoelManzanillo refleja los problemas que provocaba la circulación en la Almería de 1952, a raíz de una serie de accidentes que habían ocupado la actualidad. En concreto destaca la necesaria regularización del tráfico en la confluencia del Parque, la Rambla de Belén – Paseo – Reina Regente y carretera de Ronda – puente de Las Almadrabillas, dirección Ciudad Jardín – Zapillo.
Los Reyes Magos y la «cuesta de enero»
#BajoelManzanillo del día de Reyes de 1952 describía la «cabalgata fastuosa e impresionante» y el paso de los «soberanos» por los hogares almerienses, para una semana después reflejar el «ascenso difícil» de la «cuesta de enero», que «ofrece gran resistencia a los padres de familia, que alegre y pacientemente ‘desfilaron’ por la amplia y hermosa ‘llanura’ de la Navidad, Año Nuevo y Reyes.
Las tarifas ‘manga ancha’ de los cocheros de Almería en 1952
#BajoelManzanillo se ocupaba en junio de 1952 de las tarifas ‘manga ancha’ de algunos cocheros, que ‘cobraban a capricho’. Relata el caso concreto de uno de los coches de caballos que hizo un trayecto desde la estación del ferrocarril al centro de la ciudad cobrando el cochero 20 pesetas, prácticamente el doble de lo que debería costar. Criticaba que no se respetaran las tarifas.
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