#BajoelManzanillo retrata el día intensivo que vivió el Puerto de Almería el 19 de marzo de 2022, donde miles de personas, almerienses, visitantes y tripulaciones de barcos, tomaron el recinto portuario con motivo de la visita de buques significativos de la Armada, española e italiana; la estancia del crucero ‘Seabourn Encore’; y, el impulso que están tomando las líneas marítimas regulares con el norte de África. Muchos pisaron los muelles por vez primera, en una auténtica jornada de puertas abiertas, eficaz revulsivo para revitalizar el Puerto.
Los varios miles de almerienses – 6.000, según fuentes oficiales- deseosos de visitar los buques de guerra amarrados en los muelles portuarios, las tripulaciones de los barcos de la Armada, española e italiana, los cuatrocientos cruceristas que pasaron el día en Almería, y los pasajeros que usaron las líneas regulares marítimas con el norte de África dieron este 19 de marzo de 2022 un ambiente excepcional al Puerto de Almería, que recobró el intenso transito de personas de los buenos tiempos. Hacía años que las dársenas no se llenaban de tanta vida, llamando más la atención tras los dos años de pandemia transcurridos. Ha sido un día señalado, bien organizado, por lo observado, aunque hubo numerosas quejas que hablan de lo contrario como recogemos más abajo, y de disfrute en general. Jornadas de este tipo son necesarias, hacen que muchos almerienses conozcan, por vez primera, su puerto y son auténtico revulsivo para revitalizar las instalaciones portuarias.
En pocas palabras, estas acciones acercan el Puerto a los ciudadanos. Hagamos un paréntesis en lo negativo, con ánimo solo constructivo. Lástima que la ciudad, tras la calima, no ofreciera su mejor aspecto, como más de un turista comentó. La suciedad se acumulaba en el Parque Nicolás Salmerón, sus aceras, zonas de esparcimiento, bancos, fuentes, esculturas, etc. Como primera impresión de Almería, nada más bajar del barco, los cruceristas quedaban sorprendidos del panorama lamentable que presenciaban. Fuimos testigos de algunos comentarios que sonrojan. La suciedad del barro, sigue muy presente en calles y plazas almerienses a la espera de una profunda campaña de limpieza que llegue a todas partes. Dejando al margen lo accidental de la calima, el municipio tiene una asignatura pendiente en este aspecto, que ha de acometer, de una vez por todas.
Regresemos al Puerto. Las líneas marítimas regulares con Argelia, Marruecos y Melilla van tomando actividad poco a poco. Una vez restablecido el servicio, ya son muchos los que usan el medio marítimo para sus traslados al continente africano y viceversa. Este sábado lo hicieron un buen número de pasajeros en los buques de las navieras que tienen las concesiones de estos servicios, lo que contribuyó a que el bullicio en el área portuaria fuese mayor.
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Abierta la temporada de cruceros
Si ya de por sí, el Puerto recobra su normalidad, hay otros dos factores que ayudaron a que esta jornada fuera especial. De una parte, el barco turístico de lujo ‘Seabourn Encore‘ inauguró la temporada de cruceros en Almería, que se prolongará hasta finales de noviembre, con quince escalas más, según las previsiones actuales de las navieras. En el crucero viajaban 400 turistas, que han dedicado su estancia en Almería para conocer la ciudad.
Según informa José Martínez Arias, responsable de comunicación de la Autoridad Portuaria, el ‘Seabourn Encore‘, de la naviera Seabourn Cruise, amarró en el muelle de Levante a primeras horas de la mañana del 19 de marzo, procedente de Alicante, y zarpó por la tarde, rumbo a Gibraltar. Con capacidad para 600 pasajeros y 450 tripulantes, realiza una ruta de once días por el Mediterráneo occidental, con salida y final en Lisboa. El buque fue construido en 2016, tiene doce cubiertas y 210 metros de eslora. Decorado por el diseñador Adam D. Tihany, destacan sus elementos clásicos de la tradición náutica y detalles de lujo y exclusividad, propios de los yates privados.
Al tratarse de la primera escala que hace el ‘Seabourn Encore‘ en el Puerto de Almería, como es costumbre, el presidente de la Autoridad Portuaria de Almería, Jesús Caicedo; el concejal de Promoción de la Ciudad, Carlos Sánchez; y, el delegado territorial de Turismo de la Junta de Andalucía, Vicente García Egea, mantuvieron un breve encuentro con el capitán del buque, David Bathgate, al que dieron la bienvenida, y desearon a la tripulación y a los pasajeros una buena estancia en Almería.
Representación de la Armada, española e italiana
El otro gran acontecimiento lo constituyó la expectación que despertó la presencia en el Puerto de buques de la Armada, española e italiana. Llevó al recinto a miles de almerienses, familias enteras, deseosas de visitar dos de los barcos amarrados, y a pesar de tener que guardar cola para subir a los autobuses lanzadera que les llevaban desde la Estación Marítima a la escalerilla del portaeronaves ‘Juan Carlos I‘ o del anfibio ‘Galicia‘, en la zona de Poniente.
Las maniobras ‘Gruflex‘, que se desarrollan desde el 14 al 25 de marzo, en aguas del Golfo de Cádiz, Mar de Alborán y Costa de Almería, estando conceptuadas como un ejercicio avanzado de adiestramiento y que, en condiciones ordinarias, se realiza anualmente, incluían una escala logística en Almería. Con este motivo, desde la mañana del viernes, 18 de marzo, el portaviones ‘Juan Carlos I’, el buque de asalto anfibio ‘Galicia‘, la fragata ‘Santa María‘ e igualmente el buque anfibio italiano ‘San Marco‘, estaban surtos en el puerto almeriense.
Durante parte de la mañana y de la tarde, del sábado, 19 de marzo, como hemos indicado, los almerienses pudieron visitar los buques ‘Juan Carlos I’ y ‘Galicia‘. Para facilitar el acceso se dispuso de un servicio de autobuses lanzadera que utilizaron 6.000 personas, según datos oficiales, siendo la única posibilidad de acceder a los barcos. Pero, también hubo algunas quejas, como se han puesto de manifiesto a raíz de la difusión de este artículo en la red social Facebook. Sin ir más lejos, EleGeo Ggbk, nos dejaba el siguiente mensaje: «Aquí en Almería no hay ni buena información ni organización. También se puede decir que miles de personas, y más niños, no pudieron verlos -los barcos-, ya que se les dijo que había un aforo de 3.000 personas y se tuvieron que volver. Vamos, han dejado a miles de personas, lo que son más niños, con la ilusión de verlos. Eso se organiza con tiempo y se ponen unas entradas en internet gratis o con un precio simbólico, pero no hagan que la gente vaya para nada y más con los niños. A nosotros nos pasó, pero como nosotros había muchísimas familias que dieron la vuelta. Para la próxima optaré hacer otros planes, donde tendré seguridad en que si voy a ir y no perderé más nuestro tiempo para nada. No hago el comentario con maldad, sino que me quedé indignada de la mala organización. Es una pena y espero que la próxima vez puedan organizarlo mejor«. Y, Rosario Valverde Fernández, nos comenta: «En la misma puerta le dijeron que se fueran, porque ya no cabía más gente. Los niños se quedaron con la boca abierta».
De igual manera, la despedida de los barcos de las marinas de guerra, española e italiana, a media mañana del domingo, 20 de marzo, estuvo protagonizada por varios cientos de almerienses que se concentraron en el morro del muelle de Levante para decir adiós a las tripulaciones.
Es importante resaltar que la organización de todas las actividades fue perfecta. La Autoridad Portuaria, contó, entre otras, con las colaboraciones de la Comandancia de Marina, la subdelegación del Gobierno, el Ayuntamiento de Almería, las Fuerzas de Seguridad del Estado – Guardia Civil y Policía Nacional – y de la Junta de Andalucía. Cuando las administraciones se unen, las cosas funcionan.
Jornadas de tanta intensidad revitalizan el Puerto de Almería, son un revulsivo inequívoco para aumentar el conocimiento y cercanía de la ciudadanía y hacen olvidar la lejanía que se padece desde hace varias décadas. Es bueno el regreso de los almerienses al recinto portuario como antaño, para disfrute de todos, respetando, por supuesto, los protocolos de seguridad establecidos.
José Manuel Román
Periodista
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