#BajoelManzanillo en diciembre de 1951 recogía la denuncia de vecinos de Almería sobre la presencia en los barrios de ‘animalitos, pequeños y grandes‘ en las puertas de las casas, el ‘tendido de ropas de acera a acera’, y el ‘encendido de fogones en plena vía‘, solicitando ‘una adecuada inspección municipal‘



Vamos a hacernos eco hoy de unas cartas que han llegado a nuestro poder procedentes de unos típicos barrios de la ciudad los que por lo visto, sufren consecuencias semejantes, que si bien no son para echarse las manos a la cabeza, no por ello deja de tener su importancia y que reclama su extinción. Se refiere uno de nuestros comunicantes a la permanencia en puertas de las casas, aceras y calles de animalitos, pequeños y grandes, que toman pacíficamente el sol y engordan a plena intemperie, ocasionando las molestias correspondientes en lo que al aseo de las calles respecta. Otro se refiere al tendido de ropas de acera a acera y un tercero al encendido de fogones en plena vía, cosas todas ellas que, si mal no recordamos, prohíben las ordenanzas municipales y que indiscutiblemente molestan a los vecinos y viandantes. Por ello, una adecuada inspección municipal por los diversos sectores almerienses para que las terrazas y patios sean el marco adecuado donde se hagan todos estos menesteres caseros, sería todo un acierto. Así lo reclaman tales vecinos que a nosotros se dirigen y así lo registramos nosotros que tanto nos preocupa el buen aspecto y salubridad de las calles de nuestra capital.
EQUIS (seudónimo de Manuel Román González)
(‘Yugo’, martes, 4 de diciembre de 1951, página 2)

Vista de Almería años 50.- Foto Archivo Diputación Almería 
Barrio de Pescadería.- Foto Archivo Diputación de Almería. 
Calle de uno de los barrios de la Almería de los años 50. 
Familia en una calle de una ciudad española, en una escena parecida a como se describe en ‘Bajo el Manzanillo’.
